Este es un camino que muy pocos deciden transitarlo, quizás porque es “más fácil” no hacerlo. A veces las personas piensan que Despertar es un camino de pétalos y rosas, cuando es completamente lo contrario. Es un camino donde se requiere mucha valentía y mucho coraje.

Me encanta la analogía que se da en la película The Matrix, cuando Morfeo le pregunta a Neo que pastilla desea tomar, la roja o la azul. Si escoge la azul, entonces regresa a su cama a dormir plácidamente y no sucede nada, sus días cotidianos pasan sin darse cuenta si está despierto o dormido, simplemente vivirá en “piloto automático”. Pero si escoge la pastilla roja, entonces descubrirá que tan dormido estaba, descubrirá el potencial enorme que habita en su ser que está por despertar y a su vez tendrá que enfrentarse con sus partes más oscuras para darse cuenta de que la luz está al otro lado de la vía. El pequeño problema es, que una vez que tomas la pastilla roja, entonces no hay vuelta atrás.

Una vez escuché que en la vida hay dos cosas que no tienen solución, la primera es la muerte, porque todos en algún punto de la vida dejaremos este plano físico y la segunda, es el conocimiento, porque una vez que sabes ya no puedes dejar de saber. 

Quizás por esto se nos hace más fácil mantenernos en la ignorancia, porque evitamos enfrentarnos con las cosas que menos nos gustan, porque para hacer eso se requiere de un poder interno que sobrepasa lo que sea que estés viviendo. Como lo decía Carl Gustav Jung: “No es posible despertar a la consciencia sin dolor. La gente es capaz de hacer cualquier cosa, por absurda que sea, para evitar enfrentarse a su propio Alma. Nadie se ilumina imaginando figuras de Luz, sino haciendo consciente la oscuridad.” 

Pasar por este camino muchas veces te hace dudar si estás haciendo lo correcto, si es el camino que debes seguir. La gente quizás se burle incluso te ridiculicen, pero si te mantienes firme entonces verás cosas muy grandes. Llega un punto en el camino donde quisieras que el resto viva lo que estás viviendo, porque a pesar de prender la luz y darte cuenta de todo el desastre que había a tu alrededor hay una sensación de paz y de calma que no sabes como explicar pero que te encantaría que el resto viva. Aquí es donde cometemos el mas grande error de todos, porque queremos que todos en especial nuestros seres queridos miren lo que nosotros estamos mirando; en este punto debes recordar que cada quien está en un nivel de consciencia diferente sin ser mejor o peor, sin embargo, cuando quiero obligar a otros a que crezcan conmigo, entonces interrumpo su proceso de crecimiento.

En este punto probablemente te hayas ganado algunos enemigos por querer que caminen contigo o por creer que ahora sabes más que ellos. El despertar jamás puede darse si no es desde la humildad y a veces caemos en la trampa del Ego, asumiendo que porque he avanzado un poco más que el resto, entonces tengo derecho a sentirme superior.

Hay una verdad que la dijo Hipócrates en su momento, “antes de querer curar a alguien pregúntale si está dispuesto a renunciar a las cosas que lo enfermaron”

Mucha gente no está dispuesta a renunciar a eso y es allí donde debes dejar ir con humildad, sabiendo que no tienes control sobre las decisiones ni el destino de otro por más de que sea algún ser querido. Lo único que puede inspirar a otros a querer transitar este camino de despertar, es siendo el ejemplo de lo que este camino puede traer a sus vidas. Por eso nunca debes desistir, porque nunca sabes a quién estás inspirando en el camino. 

Comprendo y sé que esto puede resultar bastante frustrante, porque cuando vas comprendiendo más de la vida también se hace mas simple, te complicas menos, dejas de interesarte por cosas banales. Las cosas que antes te llamaban la atención ya no tienen sentido para ti. Incluso, comprendes el porqué y para qué han sucedido ciertas cosas en tu vida y por ende empiezas a tomar absoluta responsabilidad de tu existencia y cuando ves que tus seres queridos probablemente siguen siendo víctimas de las desgracias que han pasado en su vida, te encantaría ayudar para que dejen de repetir los mismos patrones, pero se debe comprender que sus vidas, son de ellos. 

El camino hacia el despertar no es más que un camino interno, no puedes esperar que todo lo que suceda sea fuera de ti, quienes despiertan son personas que han podido mirar en su interior y resolver los miedos, creencias y paradigmas que lo tenían aprisionado. Como decía Lao Tze: “Aquel que conquista a otros es fuerte, pero aquel que se conquista a sí mismo es poderoso”. Ser fuerte y ser poderoso tiene una diferencia abismal. La fortaleza viene de la parte física y la fuerza física tiene su límite, el poder viene de algo más grande que tu y cuando eres poderoso accedes a la fuente de la cual todos venimos que es ilimitada y cuando despiertas entonces conoces lo que realmente eres y para qué estás aquí y eso, es verdaderamente poderoso. 

Plenitud y Abundancia

Luis Miguel Ponce